Raíces de Mujer. Celebramos el día de la Mujer 2024

En la Residencia para Mayores Altos de Jontoya, por la mañana, celebramos el día de la Mujer 2024, en torno a la dinámica «Diferentes hojas, mismas raíces», muy emotiva y vital, para nuestros/as residentes.

Por la tarde, como el tiempo estaba regulero, no nos fuimos al parque del Bulevar (como estaba previsto) e hicimos un taller de belleza, nos echamos fotos y también movimos el esqueleto con canciones de «nuestra época». 🤭😜

RAICES

Raíces heredadas de nuestra más valiosa generación: ellas. Son el regalo y el mensaje de amor que deja huella para siempre, que da fuerza y que nos ancla por medio de sus ramas a la vida.

Raíces que mantienen un tronco común y que con vetas convertidas en arrugas nos dan sostén, estabilidad y seguridad.

Raíces con un mensaje en forma de manos, manos que abren el hueco en la tierra, que colocan la semilla y que después con sumo cuidado, riegan.

Raíces trabajadas, sacrificadas, dedicadas y nutridas que nos regalan ramas de vida, dando fruto y brotando de ellas el amor. Ramas que simulan brazos agarrados a un tronco donde siempre nos refugiamos queriendo permanecer. Allí, a las hijas nos hacen fuertes, nos llenan de valores y nos sirven de ejemplo de superación. Raíces nutridas que engendran más vida envueltas en cuidados de amor.

Pasan los años,  el tronco cada vez es mayor pero siempre con fuerza para sostener un nuevo corazón, que viaja hacia la vida inocente como una flor que florece y que renace alegre manteniendo viva a la vejez.

Pongamos en valor las raíces de nuestra vida que nutren nuestro tronco, hidratan nuestras ramas y oxigenan nuestras hojas. Recorrido vital del que ellas forman parte indispensable.

Homenajeemos a ellas, que nos alimentan, nos anclan a la vida y nos dan alas para que emprendamos el vuelo, unidas bajo un mismo lema, ser mujer, ser raíz. Ellas, que están y las que no están pero que nunca se fueron.

Apreciemos el árbol, cuidemos y amemos la raíz, ahí es donde radica la riqueza y fortaleza que emana de ella.

Unidas a este tronco permaneceremos toda la vida.

El regalo más preciado; su esencia, mis RAICES.