Una bonita casualidad

Una bonita casualidad para seis enfermeras

Amigas y compañeras de la Residencia Altos del Jontoya comparten una etapa tan bonita como es el embarazo

Diario Jaén, 4 Mayo 2017MARIELA SORIANO

“El destino ha hecho que coincidamos en lo más maravilloso que le puede pasar a una mujer”. Así de emocionadas se expresan seis enfermeras de la Residencia Altos del Jontoya, que además de compartir el trabajo del día a día y disfrutar desde hace tiempo de una férrea amistad, ahora están unidas en una de las etapas más bonitas de la vida: su embarazo.

“La noticia de nuestro estado en la residencia ha sido de alegría. Aunque también es verdad que la casualidad de quedarnos 6 enfermeras embarazadas de las 7 que estamos casi a la vez ha hecho que nuestros jefes tengan que buscar a gente para cubrir nuestros puestos. Pero la residencia queda en muy buenas manos”, subraya María Espinosa, que será mamá primeriza de un niño. En la misma situación se encuentra María Jesús Collado, que trabaja en la residencia desde 2010 y que tendrá una niña. Incluso, han creado un grupo de Whatsapp desde que conocieron su estado para compartir las dudas y consejos que puedan tener en este tiempo.

María del Carmen Millán, mamá de un niño de casi 2 años y que espera su segundo pequeño, del que aún no sabe el sexo, habla de su amistad: “Nos compaginamos, entendemos y conocemos con solo una mirada. Somos 6 piezas de un puzzle que encaja a la perfección, a pesar de ser muy diferentes, pero aportamos lo que se necesita en cada momento”.

Como es lógico, cada una lleva su ritmo, por lo que en el caso de Marta Ortega ya ha dado a luz a su primer hijo. En un principio, su intención era la de hacer Fisioterapia. Pero el destino le dio la oportunidad de estudiar Medicina y luego se cambió a Enfermería: “Me gustó y descubrí mi vocación en el hecho de cuidar a los demás”.

También de la profesión habla María Isabel López, que va a ser mamá primeriza de mellizos, niño y niña: “La enfermería es totalmente vocacional, ya que no hay nada mas gratificante que curar, cuidar y aliviar, en nuestro caso, a nuestros queridos abuelos y residentes, que son como parte de nuestra familia, ya que pasamos mucho tiempo con ellos. Mañanas, tardes, noches, días de fiesta, cumpleaños… algunos buenos y otros no tanto, y jornadas de mucha carga laboral y emocional. Pero todo eso nos ayuda a mejorar como profesionales y personas”. En el caso de Rosa María López, mamá de una niña de 4 años que ahora espera un niño, tenía claro su oficio desde pequeña: “Aunque estudié una carrera distinta, abandoné un trabajo fijo por conseguir mi sueño”.

Una bonita casualidad

EMBARAZADAS: Marta, María, María Jesús, María del Carmen, María Isabel y Rosa María.

Diario Jaén, 4 Mayo 2017MARIELA SORIANO